Favoritos_MB_webEl 14 de diciembre de 2018 me invitaron a presentar el libro «Star Wars, un ensayo urbano-galáctico» del geógrafo francés Alain Musset (editado en Chile por Bifurcaciones), en la Furia del Libro, junto con Jorge Baradit y Hermes el Sabio.

Acá lo que dije en la presentación:

Hay mucha literatura de género que se ha basado en escenarios. El ejemplo más clásico es la literatura gótica donde el escenario principal son los castillos (como novela fundacional tenemos: El Castillo de Otranto), luego mansionescasas (cuando las novelas góticas se trasladan a Estados Unidos: La casa de las siete buhardillas, Siempre hemos vivido en el castillo) y finalmente la casa- cabeza (recordemos Casa tomada), como metáforas donde ocurre la acción.

Pudiera parecer que en la literatura de ciencia ficción no hay nada parecido a un escenario, ya que transcurriría en un espacio abierto, justamente el espacio. Pero no. Hay un espacio omnipresente y son justamente las ciudades: ciudades-planeta, ciudades cárcel, ciudades como organismos vivientes, ciudades que existen bajo tierra… infinidad de ciudades (recordemos las Ciudades Invisibles de Italo Calvino).

Lo que plantea el libro es que desde muy temprano en la ciencia ficción la relación entre quienes ocupan las ciudades se ha plasmado en el diseño de las mismas, primero en un sencillo arriba para las clases dominantes y abajo para las clases obreras (como se ve en Metropolis, ejemplo que se detalla en el libro) y también en La máquina del tiempo de HG Wells, donde el arriba es ocupado por la decadente raza de los Eloi y el abajo por los caníbales Morlocks (idea que fue retomada luego por los X Men de Chris Claremont donde los mutantes que podían pasar por humanos vivían en el mundo de arriba y aquellos demasiado deformes, que se llamaban a sí mismos morlocks, malvivían en los túneles de metro de Nueva York).

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Eloi arriba, morlocks abajo en la película de 1960

Estos ejemplos se mencionan en el libro para indicar una dinámica en Coruscant donde la clase dominante parecer alcanzar el cielo y el abajo es una zona de nadie, donde la anarquía y los bandidos proliferan. Lo mismo se presenta en Blade Runner, donde el abajo es el infierno y el arriba, el cielo; arriba hay orden y abajo caos. Recordemos que es en la azotea donde Deckard mantiene a su costosa oveja eléctrica (en el libro). 

Es una versión muy simplificada pero recurrente en la ciencia ficción en otras obras se elabora más complejamente, por ejemplo el arriba-abajo se integra en La ciudad y la ciudad de China Mieville, donde coexisten dos ciudades en un mismo espacio, las cuales están separadas por convenciones como el no mirar los edificios que pertenecen a la otra ciudad, idiomas distintos y una serie de resquicios como zonas de ingreso donde hay que mostrar pasaportes. Acá el descubrimiento de un cadáver «entre ciudades» (en la frontera) nuevamente permite hablar de un sistema de clases y castas, donde una ciudad es espejo de la otra y el pasado en común es escondido y revisitado.

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Montaje de Beszel y Ulqoma, la ciudad y la ciudad

Otra forma de ver a la ciudad fuera de la dicotomía arriba- abajo la desarrolla el cuento “Entre los pliegues de Pekín” de Hao Jingfang (antologado en «Planeta invisibles»), donde los avances tecnológicos permiten que la ciudad pueda plegarse tres veces, rotando para que las personas de clase alta puedan vivir sin compartir su espacio con las clases más pobres, las que por la conformación específica de la ciudad, solamente funciona de noche, como una suerte de vertedero (planta de reciclaje) de lo que produce la primera ciudad, que sólo disfruta del día. Entre medio de estas dos ciudades coexiste una tercera, la de la clase media y servicios.

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Detalle de cómo funciona el pliegue de los tres Beijing (tomado de: https://medium.com/@BlackHoleBooks/a-city-in-three-dimensions-hao-jingfangs-folding-beijing-24be99afd57d)

Las ciudades como planetas, por ejemplo, Trantor de la saga de la Fundación de Isaac Asimov se transforman en archivos, en lugares de acopio y distribución de recursos y crecen para ser un ente devorador de recursos y sólo productor de burocracia y servicios, replicando a gran escala lo que sucede con las metrópolis y ciudades del tercer mundo. Son las capitales de los imperios galácticos, como Coruscant. No se produce nada realmente en estos planetas, son otros planetas factoría donde los recursos son utilizados quienes entregan su energía.

Toda esa información es detallada en el libro, el cual creo que vale muchísimo la pena leer ya que más que hablar de geografía urbana de lugares de ficción (en este caso Star Wars), es una revisión exhaustiva de una geografía urbana de lugares posibles, con gran correlato a lo que ya sucede en grandes urbes del mundo y latinoamérica.

PS: En la segunda charla que di en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile, una persona preguntó por novelas de ciencia ficción latinoamericanas que hablaran de ciudades, mencioné Kalpa Imperial de Angela Gorodischer, Ricardo Greene mencionó Vagabunda Bogotá de Luis Carlos Barragán. No recordamos mucho más.

¿Y ustedes, conocen algún libro que hable de ciudad y ciencia ficción? 

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1 comentario en Libro Favorito: Star Wars, un ensayo urbano-galáctico

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