Favoritos_MB_webDentro de la línea de recuperar artículos desde Goetia, traje éste sobre uno de mis libros favoritos: Gormenghast, específicamente el primer libro de esta trilogía: «Titus Groan» de Mervyn Peake, que tiene mucha relación con mis obsesiones de siempre: castillos, novela gótica y fantasía extraña (como Jonathan Strange y el Señor Norell):

«Habrá lágrimas y risas extrañas. Nacimientos y muertes feroces bajo plataformas sombrías. Y sueños y violencia».

Dentro de lo que podríamos llamar literatura gótica contemporánea surge la extraordinaria obra del autor e ilustrador inglés Mervyn Peake (1911 – 1968): «Gormenghast»: «Titus Groan» (1946), «Gormenghast» (1950; del que ya hablé en el blog, gracias a la serie de la BBC)  y «Titus solo» (1959), obra que quedó inacabada al morir el autor. En español fueron publicados por la maravillosa editorial Minotauro de Porrúa. Lentamente se transformó en un clásico de culto e influenció a muchos autores, como el guionista británico Neil Gaiman, quien dijo: «quisiera que mi casa fuera Gormenghast cuando fuera mayor».  Ahora está a cargo de realizar la serie de televisión, así que crucemos los dedos.

Durante la novela, vemos como el castillo de Gormenghast, hogar que protege a Titus, septuagésimo séptimo conde de Groan y heredero, a medida que pasa la historia, se transforma lentamente en el personaje, la trama, todo. Ningún personaje de la novela escapa a esta relación amor-odio con el castillo, que es tanto un lugar de opresión como el reflejo en sí mismo de la tradición y la ley, la única casa que todos conocen (comprendiendo incluso a los habitantes de Extramuro, que viven literalmente a la sombra de él).

Gormenghast es un laberinto en sí mismo, con zonas demolidas y despobladas; el inmenso lugar, descrito con un nivel de detalle abismante, tiene cámaras y salones de belleza increíble que ninguna persona visita jamás (la Sala de las Alturas Brillantes, la Cámara de las Raíces) y por consecuencia, no son significativos, excepto para quienes los visitan fugazmente y los admiran. Los personajes que habitan el Castillo tratan en vano de oponerse a esta fuerza desconcertante, a esta tradición impregnada en los muros, a esta autoridad, una fuerza aplastante que produce que todo (TODO) se siga haciendo tal cual desde sus inicios.

Los empleados continúan con las tareas que han desarrollado desde siempre (y sus ancestros antes que ellos) y la nobleza de Groan, pasiva, se deja caer sobre los restos de polvo acumulados por los siglos: Lord Sepulcravo (padre de Titus) encerrado en su amada biblioteca, su pareja, Lady Gertrude, abstraída del mundo, consagrada a sus gatos y pájaros, Fucsia, hermana mayor de Titus, de una inocencia infantil y distraída y las dos hermanas gemelas de Sepulcravo, Cora y Clarice, alimentando horribles delirios aristocráticos; motivadas por Pirañavelo, en principio un simple pinche de cocina, que luego de perderse una noche en los cielos y techos de Gormenghast, decide destruir el castillo (no de manera física: sus ladrillos, sus torres, sus cámaras; sino su alma, su esencia, como sucede en La caída de la Casa Usher: las ruinas de un castillo son también las ruinas de una familia aristócrata venida a menos).

Titus, en principio un niño y enseguida heredero del castillo, sobrelleva difícilmente el peso de la tradición que ha aniquilado a toda su familia, llena de seres patéticos y solitarios. Sin ser maquetas, los personajes repiten sus obsesiones hasta el infinito y son justamente ellos y sus obsesiones, lo que a fin de cuentas cimenta Gormenghast. Como vemos es la Tradición, la que mantiene en pie al castillo.

En Gormenghast el castillo absorbe la vida, no permite el cambio y se eleva, fiero pero siempre frágil, sobre lo mundano y profano que es el mundo exterior (Extramuro). Representa una boca voraz que proviene de la tierra y se aleja en los sueños.

B4p5f7YCAAIakd6
La maravillosa ilustración de Gormenghast de Alan Lee que me llevó a pillar los libros, muchos años después

¿La han leído? ¿Qué les pareció? 

Contacto_MB_2

7 comentarios en Libro favorito: Gormenghast

  1. La trilogía es una de mis favoritas, el entorno y los personajes oscilan entre lo claustrofóbico y los fantasmagórico, y a pesar de todo, tienen cualidades muy humanas, pese a ser presentados como retratos grotescos es fácil empatizar con ellos.
    Tifus Solo es el único de la trilogia, en el que aparece el mundo exterior pero este es igual de pesadillesco que Gormenghast.
    Hay una cuarta novela, Titus awake, pero en su mayoría fue terminada por su viuda, y es más una forma de canalizar sus sentimientos sobre su muerte que una continuación como tal.

  2. ¡Hola, Maldita Berna!,
    No conocía este libro y, sin duda, lo voy a buscar para leerlo. Me fascinan los castillos y todo lo gótico y, además, que el castillo sea un personaje en sí mismo y tenga tanto protagonismo me chifla *.*. Si además, es uno de los libros favoritos de Gaiman y se está haciendo cargo de la serie… ya no se puede pedir más.
    Mil gracias por dármelo a conocer.
    Un besito de tinta y hasta pronto 😀

Responder a Renaissance Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *